Martín Peris, E. (2004). ¿Qué significa trabajar en clase con tareas comunicativas?. Redele, 0.
En esta lectura, Ernesto Martín Peris nos quiere mostrar lo que significa trabajar con tareas pertenecientes al método de aprendizaje comunicativo, pero lo hace a partir de dos puntos de vista diferentes, que son el del profesor y el de los alumnos. Como nos indica el título de la lectura, se da cierto privilegio al método comunicativo, pero más concretamente hace referencia al enfoque por tareas, enfoque que pertenece al programa orientado a la acción. Este se caracteriza por trabajar la lengua a partir de la comunicación, haciendo hincapié en el proceso antes que en el producto.
Nos muestran algunos ejemplos de actividades y, sinceramente, me siento muy poco afortunado al no poder haber experimentado nada parecido. Normalmente nos tienen acostumbrados, por ejemplo, a diálogos artificiales en los que se dan conversaciones que nunca haríamos en la vida real. En el caso de la lectura, podemos observar como nos dan una serie de formas de contestar a las preguntas que se nos hacen, adaptadas totalmente a la realidad y fuera de lo que normalmente venimos viendo desde hace muchos años. Estos diálogos típicos muestran una versión muy seca y antipática de la lengua y lo que pretende enseñarnos Ernesto Martín Peris es que no es nada complicado evitar estas conversaciones irreales.
También se enfatiza el concepto de secuenciación de materiales. ¿Cómo y cuando y porqué deben hacerse ciertas actividades? Lo que nos quiere decir el autor es que las actividades deben tener un orden lógico, de manera que las unidades vayan dándose en su momento exacto, entrelazándolas con otras que tengan cierta relación, haciendo que el alumno se sienta guiado en el aprendizaje y se vean cada vez más motivados a medida que se les muestran las unidades. Aquí entra en juego un aspecto muy importante: el dinamismo en la clase.
Como he dicho al principio de la entrada, el autor nos quiere dar los dos puntos de vista en relación al enfoque comunicativo. El caso es que ambos tienen que poner de su parte para que este enfoque funcione y se lleve a cabo con la máxima naturalidad. El profesor tiene que adaptar sus métodos de enseñanza, creando actividades en las que se trabaje la comunicación, la interacción y la cooperación entre todos los alumnos, pero debe hacerlo a partir de actividades significativas, que muestren el uso de la lengua. Los alumnos también deberán hacer cambios. Comunicarse significa interaccionar con otros miembros de la clase, por lo que se realizarán actividades tanto en parejas como en grupos, promoviendo el trabajo conjunto, el dinamismo entre compañeros, etc.
Como conclusión, me gustaría decir que el enfoque comunicativo es uno de los más interesantes que he visto hasta ahora, ya que me parece el más adecuado y dinámico para aprender una lengua. Enfatiza en la comunicación, porque es de la única forma que se puede aprender una lengua en su totalidad.
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